Cuerpos de inteligencia de la Armada de Colombia informaron que en el caso de las “narcovacas”, que las 4,5 toneladas de cocaína incautadas en las islas Canarias dentro de un cargamento de ganado que iba a Líbano, en Medio Oriente, son del “Clan del Golfo”.
El Clan del Golfo es una organización criminal colombiana que forma parte de un cese al fuego bilateral decretado por el gobierno colombiano. En dicho decreto se establece que la fuerza pública no puede hacer operaciones ofensivas contra las organizaciones delictivas que lo forman.
El gobierno colombiano encabezado por el presidente Gustavo Petro, actualmente lidera una polémica propuesta de ‘paz total’ con el ELN y con diversos grupos armados colombianos más dedicados al narcotráfico. Entre los suscritos está el Clan del Golfo.
La incautación de la droga ocurrió en pasado 28 de enero cuando la Policía Nacional y el Servicio de Vigilancia Aduanera de España, detectaron que una embarcación identificada como Orión V procedente de Colombia y con destino a Beirut, en el Líbano, transportaba 1.750 cabezas de ganado con cocaína. Por esa razón este golpe policial contra el Clan del Golfo es conocido como el caso de las narcovacas.
En el operativo capturaron a 28 tripulantes: 10 de ellos tanzanos, cinco sirios, cuatro kenianos, dos colombianos, dos ecuatorianos, dos panameños, un dominicano, un nicaragüense y un nepalí.
El informe de inteligencia
En su reporte sobre las narcovacas, la Armada colombiana indicó en su reporte que luego de investigar al buque Orión V, se detectó que la nave es propiedad de la subestructura “Héroes del Caribe”, de la Estructura “Erlin Pino Duarte” del Clan del Golfo.
El vicealmirante, Hernando Mattos, comandante de la Fuerza Naval del Caribe, explicó que el operativo policial fue resultado de un trabajo de inteligencia que la armada le hacía a la embarcación Orión V. Asimismo dijo que, teniendo en cuenta que la nave viajaría a Líbano, sospecharon su uso para trasportar drogas.
El oficial en su informe detalla que la nave estuvo en el puerto de Cartagena, pero que la droga no fue traspasada a la embarcación en esa instalación portuaria. Ese dato hace sospechar que el traspaso se realizó en altamar, desde alguna embarcación no identificada. Por esta razón las autoridades creen que es altamente posible la complicidad de la tripulación.
A partir de esta investigación, las autoridades colombianas informaron a las del reino de España para que interceptaran a la embarcación. De esa forma la Policía nacional de España abordo la nave, y luego de detectar rastros de droga, la detuvo y obligó a ir escoltada a puerto canario, donde una verificación exhaustiva determinó que llevaba 4,5 toneladas”.
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