Recientemente, a través de un decreto, el gobernador del estado Mérida, Jehyson Guzmán, estableció que los comercios y otros establecimientos con alto consumo eléctrico deberán autogestionar su energía, especialmente en horas pico. Esto con el objetivo de reducir la demanda al sistema eléctrico nacional y, por lo tanto, los cortes de luz.
Para controlar esta normativa, se creó una comisión conformada por entes civiles y militares. Esta comisión evaluará el consumo eléctrico de los establecimientos, iniciando por el edificio de la Gobernación en Mérida. Si se determina que es necesario, los establecimientos deberán adquirir sistemas de autogeneración eléctrica.
El gobernador explicó que la ley se establece como una medida para mitigar los cortes de luz, que afectan la cotidianidad de los merideños. La ley establece que los cortes no deben ser mayores de tres horas por sector.
Ahora le toca a la Administración Pública, en medio de una instrucción de su oficia de recursos humanos bastante mal redactada y poco entendible, Carlos Luis Vento Miranda, indica que se deberá trabajar hasta las 2 de la tarde en todas las dependencias de la gobernación, excepto en saludos y “servicios públicos”, y deberán desconectarse del sistema eléctrico de 11 a.m. a 2 p.m., debiendo conectarse si les es posible a el servicio autogenerado.
En este sentido el economista y profesor universitario Leonardo Vera se pregunta ¿Cómo puede progresar un así?, haciendo clara referencia a la cantidad de horas de trabajo y la imposibilidad del uso de la red eléctrica nacional en las horas de trabajo más álgidas,
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