Caracas, 24 de septiembre de 2018/.- La empresa de envases Smurfit Kappa anunció este lunes que perdió el control de las instalaciones de su filial Smurfit Kappa Cartón de Venezuela, que fueron ocupadas por el gobierno, y que asumirá un cargo de 60 millones de euros.
“Desde la notificación de la orden de ocupación, la compañía ha sido objeto de interferencia del Gobierno, incluso mediante hostigamiento arbitrario a sus empleados por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) a través de visitas no autorizadas que tienen el efecto de intimidar a la fuerza de trabajo”, dijo la empresa en un comunicado de prensa.
Dos empleados de la compañía continúan bajo arresto, que Smurfit Kappa considera arbitrario.
La mayor fabricante de cartones de Venezuela, que tiene su sede en Dublín, dijo que se reserva el derecho de ejercer acciones legales. Reseña Reuters.
El 21 de agosto la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) anunció la “ocupación temporal” de dicha empresa, ubicada en Valencia (Carabobo).
El titular de la Sundde, Williams Contreras, afirmó que la empresa incurrió en “el delito de boicot a la producción nacional, elevando los costos de múltiples productos”.
Agregó que operaba bajo una “práctica especulativa y de discriminación”.
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