Caracas, 18 de enero de 2022
La teoría de cuerdas es un intento para unificar las ecuaciones que explican a las cosas grandes del universo con las cosas diminutas y subatómicas. Comentaremos sobre esto y su aplicación al caso venezolano.
Alberto Einstein propuso con su teoría general de la relatividad y otros aportes fórmulas precisas que explican el funcionamiento del enorme universo, sus planetas, la relación entre la energía y la masa, la gravitación y un gran etc. Pero por otra parte los físicos debieron desarrollar otras fórmulas, muy distintas, para explicar el funcionamiento del mundo de lo pequeñísimo, el mundo de las partículas atómicas.
El mundo de las partículas atómicas es una locura difícil de entender. Allí todo lo que nos parece lógico deja de serlo. A veces las partículas se muestran como eso, pero otras veces como ondas de energía. Pueden estar y no estar al mismo tiempo. Pueden hermanarse entre partículas y lo que hace una lo reproduce la otra no importa cuán lejos esté. Bueno un mundo muy muy raro, pero real, el mundo llamado de la física cuántica.
De tal forma que la física moderna tiene un gran reto. Las ecuaciones de Einstein funcionan y han sido probadas ampliamente y las ecuaciones de la física cuántica funcionan muy bien para explicar el microcosmo, sin embargo, cuando se trata de acercarlas a través de las matemáticas las dos teorías son incompatibles.
La teoría de cuerdas es una nueva forma de plantear el funcionamiento del universo que podría lograr la sintonía entre las teorías de lo inmenso con lo diminuto, es decir, la teoría de Einstein con la teoría cuántica. La teoría de cuerdas propone que todas las partículas atómicas y subatómicas están formadas por un solo elemento que vibra a diferentes frecuencias. Este único elemento es una especie de cuerda que genera ondas y así, si vibra a la frecuencia “a” es un protón, si vibra a la frecuencia “b” es un neutrón o si vibra a la frecuencia “c” es un quark.
La teoría de cuerdas es una de las áreas más intensas de investigación de los físicos teóricos de la actualidad, pues sería la explicación global de todos los fenómenos físicos sin importar su dimensión. Pero no es tan fácil. Tiene serias dificultades pues propone la existencia de diez dimensiones, es decir seis más de las usuales tres más el tiempo y además su posibilidad de hacer experimentos que la comprueben luce improbable.
Pero será cosa de esperar que la solución aparezca. En cualquier caso, la explicación física de todo el universo es algo que supera la más aventurada de nuestras fantasías. Las matemáticas de la teoría de cuerdas revelan la existencia de otros muchos universos así que la cosa está que arde y nada nos debería sorprender.
Hasta la curiosísima propiedad, probada, de que cuando dos partículas se hermanan y luego, sin importar la distancia, lo que hace una lo reproduce la otra podría llevarnos a la especulación de que si nuestras partículas cerebrales se hubiesen hermanado podríamos seguir pensando en otra dimensión para siempre.
Ahora bien, porqué este preámbulo, pues porque dentro de la enorme balumba venezolana pareciera que deberíamos buscar una teoría de cuerdas que le dé una solución entre las posiciones y acciones del régimen frente a las muy distintas de la oposición.
No importa hacia donde miremos. El régimen está rodeado de problemas. Muy pocos ya lo quieren ni respetan, se han convertido en hampones, la opinión internacional es muy desfavorable, la economía es un desastre, la permisividad para la intervención extranjera en los asuntos internos es inmoral y el orinarse en la Constitución lo han vuelto lo normal.
Por su parte, la oposición al régimen representada por partidos y muchísimos ciudadanos, están frustrados de no haber podido derrumbar al régimen y se acusan mutuamente como culpables de eso. Algunos dicen que hay que hacer esto o aquello y otros se oponen ferozmente. De la misma forma los ciudadanos tenemos opiniones diversas y contradictorias. Basta revisar cualquier grupo de Whatsapp con corte político para comprobarlo. En lo único que sí parece todos estamos de acuerdo es en que hay que salir del régimen.
La teoría de cuerdas para Venezuela no es tan peluda como la de la física teórica. Aquí todo se resuelve con unas elecciones limpias de presidente y asamblea nacional. Esa es la cuerda que amarra la solución a la gravísima situación venezolana.
Las conversaciones en México deben reanudarse pronto y acordar un cronograma con adelanto de elecciones. No hay duda que habrá un cambio de gobierno y allí comenzaremos la difícil tarea de reconstruir al país.
Las cosas lucen bien.
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