(Opinión) La “batalla Marcano-Barreto en Anzoátegui” Por Edgar Perdomo Arzola

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Caracas, 01 de octubre de 2021
@percasita
 “Los malos gobernantes son elegidos por los buenos ciudadanos que no votan”. George Jean Nathan.

Los anzoatiguenses elegirán  gobernador, el próximo 21N, y a 21 alcaldes. El escenario político venezolano volverá a ponerse a prueba ese domingo, cuando miles de votantes acudan a las urnas para elegir a sus gobernadores, alcaldes, diputados regionales, y concejales.

En un principio, puede parecer una elección de interés regional, y  local. Pero lo cierto es que la contienda será observada de cerca por analistas, y expertos, pues sus resultados pueden incidir fuertemente en el futuro político de este país, convulsionado por la grave crisis económica.

En los últimos comicios de diputados  realizados en diciembre 2020, el psuv  se impuso con un amplio  margen frente a los bloques opositores, abstencionistas, y disidentes dispersos, que han estado en la oposición en  los últimos 22 años.

Anzoátegui cambiará”: causas-motivos, para entender los posibles resultados de las  elecciones en Anzoátegui el 21N.

El resultado podrá causar una enorme sorpresa, y desafiar todas las predicciones que existen hasta este momento.

Para muchos, la nación liderada por Nicolás Maduro: donde “la crisis sigue igual golpeando a la clase trabajadora” y, según analistas, gran parte de este fenómeno se explica gracias a lo que se conoce como la “diáspora” que comenzó en octubre de 2014.

“Calidad de vida” y “no más emigración” son algunas de las frases que se repiten en las calles de Venezuela. En este contexto, la votación de ese día cobrará especial relevancia, pues mostrará si ese cambio en las preferencias políticas de los venezolanos se mantiene o no.

Y esto es aún más importante, si se considera que faltan apenas 1 mes, y 20 días para esa elección regional, y local, prevista para el 21 de noviembre.

Una de las regiones que genera mayor expectación es la Metropolitana (que incluye  Barcelona, Lechería, Puerto La Cruz, y Guanta), donde compite un postulante del PSUV,  con una mediana experiencia en puestos de poder, Luis José Marcano, contra los candidatos apoyados por la dispersa oposición, y el Alacrán de Primero Venezuela—un esquirol politiquero, del sector  mas corrupto de la politiquería de albañal, que traicionó a sus compañeros opositores, al recibir una fuerte cantidad de dólares, del Jeque de Cabo Verde, para salvarlo de su extradición a USA, según el portal armando info,  este invertebrado irrumpió como líder negativo hace unos dos años, cuyas riquezas mal habidas como vehículos, casas, ropas de marcas, exhibe impunemente, y que ha desafiado a sus ex compañeros de la unidad opositora de los pactos tradicionales.

A esta contienda se le denomina la: “batalla de Anzoátegui 2021, por ser un estado altamente opositor”.

¿Volverán a triunfar los opositores, o los nuevos liderazgos como el de Luis José Marcano frente a los representantes de partidos tradicionales como el del actual gobernador Antonio Barreto Sira? ¿Continuará creciendo la preferencia por los candidatos del PSUV, en desmedro del campo opositor? ¿Como: en Guanipa con el Chacho Rodríguez, El Tigre con Jesús Figuera, Boca de Uchire con Alexander Nasser? 

Esta es la primera vez que los gobernadores, y alcaldes serán electos por los ciudadanos, en medio de una terrible crisis socio económica, lo que se planteará un cambio histórico en la estructura política del país. Veremos si será eliminada, la figura del “protector”, qué es designado por el presidente, donde pierde la revolución.

Ahora, el nuevo líder regional, y los locales —que asumirán el cargo en noviembre o diciembre, y se mantendrán en el durante cuatro años— veremos si se convertirán en un contrapeso importante para el poder central,  al tener una representación popular, y se le devuelvan las atribuciones claves para la toma de decisiones en el área que representen.

“La importancia de estas elecciones será la democratización de los gobiernos regionales, y locales,  no solamente desde el punto de vista ciudadano, sino también desde el propio sistema político, porque se incorporaran de nuevo las competencias plenas arrebatadas que, sin duda, va a ser un contrapeso al gobierno central”.

Por esta razón, para los candidatos es de suma importancia quién salga elegido.

Además, estos comicios previos a los presidenciales del 2024, serán una especie de “termómetro” para medir las preferencias políticas de los anzoatiguenses.

Por eso es que expertos aseguran que si la balanza queda inclinada hacia la revolución, o la oposición, en la gobernación, y alcaldías, el candidato al sillón presidencial de ese bloque podría salir más beneficiado, o viceversa.

“Los distintos conglomerados políticos gobierno y oposición,  van a demostrar su capacidad de movilizar, y convocar a las personas para esta histórica elección de gobernadores y alcaldes, en medio de este caos económico. Y quienes ganen puestos en la elección quedarán mejor posicionados para dar el puntapié inicial a la campaña presidencial 2024”.

El caso más emblemático es el del área Metropolitana, donde hay  miles de personas habilitadas para votar, lo que representa casi un tercio del padrón electoral.

Luis José Marcano es respaldado por Partido Socialista (PSUV), Antonio Barreto Sira, por la coalición opositora, quien aún no ha confirmado su interés por la candidatura, a la hora de escribir esta nota. El Alacrán no figura en el radar de las encuestas, ha provocado que estrategas electorales,  ya lo consideren muy lejos de la ambulancia, recogido en camilla.

“Si Marcano gana, es una buena noticia,  para el sector de la izquierda tradicional, pues podrán clamar que la gente está a favor de sus propuestas, y no de la izquierda ultrosa”, dicen muchos cientistas políticos.

También podría darse el escenario de que la oposición dispersa —que sorpresivamente quedó fuera de la candidatura de Barreto Sira—se vuelque a apoyar a Barreto.

“Quizás alguien podría decir de que si gana Barreto Sira, es porque la gente se asustó, y votó en masa por él, de la misma manera en que la gente podría votar por Marcano para evitar que Barreto siga en el poder”, me explican, muchos expertos en filosofía política, y académicos  de  universidades de prestigio.

“Si Marcano gana la gobernación, sería interesante porque el PSUV tendría a los alcaldes de Guanipa, Simón Rodríguez, y Boca de Uchire, entre otros como aliados, como gobernador de la región de Anzoátegui. Yo diría que para Marcano seria un escenario ideal”.

La importancia del triunfo de los líderes regionales también radica en la exposición que estos tendrán en los meses previos a las presidenciales del 2024.

“Los gobernadores van a tener más cercanía con la gente, van a tener una plataforma que puede beneficiar mucho a los candidatos presidenciales del 2024”.

Esto puede eventualmente convertirse en una desventaja importante para los candidatos del bloque revolucionario actualmente en el poder, que no solo quedaran marginados de esa magna competencia presidencial en el 2024.

La coalición opositora tiene los ojos puestos en las trece regiones donde tiene candidatos fuertes, tres de las cuales son especialmente relevantes: Zulia, Lara, y Táchira.

Si la oposición no llegara a ganar en ninguna, se reforzaría la debacle electoral sufrida en diciembre 2020,  y les repercutiría inevitablemente en sus aspiraciones presidenciales.

Pero más allá de la preferencia por la revolución, el centro, o la derecha, esto será una elección entre liderazgos tradicionales, considerados parte del establishment, con algunos rostros nuevos, y rupturistas, que plantean un cambio profundo en la Venezuela  de los últimos 22 años.

Lo que no deja dudas es que los resultados de estos comicios del 21N,  estarán fuertemente influenciados por una desconfianza de la población, en  el sistema político electoral venezolano, cuya manipulación  descarada, puede desatar un estallido social.

La gente va a salir a votar, y que ya resona con fuerza ese mensaje,  en comentarios que se escuchan, mayoritariamente en contra de la clase política en general, y de las élites de asiáticos, y del medio oriente en particular.

Además, cuestiones como la justicia social, la desigualdad, y la discriminación se toman la agenda, que posiblemente cambiaran el eje de la discusión.

Así, afloraran los apoyos a las candidaturas, y a los nuevos liderazgos.

Esta vez, varios de los candidatos a gobernadores, y alcaldes  intentaran desvincularse de los bloques políticos tradicionales, a pesar de que están siendo apoyados por ellos.

En estas elecciones se verá una competencia entre “la política tradicional, y la nueva política”. “La apuesta de ese sector nuevo votante es asociar a los políticos tradicionales con un sistema excesivamente complaciente, y corrupto del cual ellos no forman parte”.

Marcano debe centrar su discurso en el fortalecimiento de la “dignidad de la gente”.

Por el contrario, Barreto hará énfasis en su larga experiencia en cargos públicos, desde alcalde de  Cantaura una de los pueblos más populares de Anzoátegui. “Yo sumaré algo que Marcano no tiene, la experiencia de gobernar”, ha dicho el candidato a la reelección.

Sin embargo, el escenario no esta fácil para Barreto: a pesar de que al comienzo todos los analistas apostaban por su triunfo, la popularidad de Marcano ha aumentado considerablemente. Y algunas encuestas han pronosticado su victoria.

“Nadie duda, desde el punto de vista de las competencias, que Barreto está mejor preparado. Pero pareciera que estar mejor preparado, o tener un programa más completo, no es hoy día lo más definitorio”.                                                        

Pero los expertos advierten que no se debe menospreciar la larga experiencia de Barreto en su Cantaura natal.

En la recta final de la campaña de gobernadores, la expectación en Anzoátegui ha aumentado considerablemente.

Ahora queda esperar a los resultados para tener una idea más clara de las preferencias de los electores luego de esta crisis social tan profunda como la que se vive en esta nación.

Lo que suceda el 21N del 2021, dicen los analistas, deberá ser también observado atentamente por otros países de América Latina que están enfrentando estallidos, y crisis de totalitarismos.

*Punto de Corte no se hace responsable de las opiniones expresadas por sus autores, quedando entendido que son responsabilidad de sus autores

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