Caracas, 06 de julio de 2018/.- Luego de haber sido reelecto presidente de la República, en unas elecciones que fueron rechazadas a nivel nacional e internacional, Nicolás Maduro plantea al golpeado pueblo venezolano, siete líneas estratégicas para “garantizar la estabilidad social, política y económica” que requiere el país.
A su juicio, las mismas buscan lograr la “reconciliación nacional, la defensa de la soberanía y el reimpulso del aparato productivo”.
Pero como “Por sus frutos los conoceréis” (Mateo, 7:20), vamos a enfocarnos en las acciones que en el marco de esas siete líneas estratégicas han ejecutado desde el ejecutivo nacional, para garantizar la ”mayor suma de felicidad al pueblo”:
– Diálogo, pacificación y reconciliación nacional. Convoca a todos los sectores del país, sin discriminación, en favor del bienestar social. En su accionar se incluye el otorgamiento de beneficios a procesados vinculados con acciones de violencia política, ocurridas entre 2014 y 2018, así como su incorporación a la vida pública sin armas.
Casi un 99% de los presos políticos excarcelados, fueron liberados con medidas sustitutivas de libertad, es decir, no están presos pero los andan buscando. Son vigilados, perseguidos, confinados al aislamiento político y con regímenes de presentación.
Hay dos excepciones: Vilca Fernández (Desterrado) y Joshua Holt, el norteamericano que logró su libertad en su tierra natal.
– Avanzar en un acuerdo económico productivo para lograr la estabilidad y prosperidad. Incluye acciones para el reimpulso de la producción de riquezas y satisfacción de necesidades, así como un nuevo sistema de distribución y comercialización.
No existe hasta ahora ningún plan concreto para apalancar el sistema productivo del país, para cuyo fin se requiere de una gran inyección de recursos que el Estado no tiene, tomando en cuenta que su principal fuente de ingresos (industria petrolera), se encuentra en niveles mínimos históricos de producción (1.300.000 barriles de petróleo diario).
A ello hay que sumarle, la caída de las reservas internacionales que se ubican en $8.448 millones (Rendivalores), mientras que el Producto Interno Bruto se ha reducido durante los últimos 5 años en 45,8% (Fedecamaras).
Igualmente, el pago de deuda externa, aún y cuando existan cuotas vencidas y un default selectivo desde el año pasado, no existe la intención de paralizar pagos y utilizar dichos recursos para invertir en la industria nacional.
Solución: Todas las acciones del ejecutivo continúan dirigidas al último eslabón de la cadena productiva, y se enfocan en generar controles a través de precios “acordados” con empresarios, una receta que ya fue probada y también fracasó.
El discurso tampoco cambia, Hiperinflación=Guerra Económica, y quién nos declaró la guerra, el imperio responde Maduro y su combo. ¿Podrán acabar con el imperio? No, entonces tampoco con la supuesta guerra económica. ¿Qué hacemos?, y allí aparece la solución mágica a todos nuestros problemas: Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP)
– Lucha renovada y frontal contra todas las formas de corrupción. Aboga por el surgimiento de una nueva ética patriótica, ciudadana, social y económica. De igual modo, apuesta por la erradicación de los modelos burocráticos y minimalistas de gestión.
La lucha “frontal” contra la corrupción depende de que tanto te le hayas volteado a Maduro y su combo, de allí que las encarcelaciones dentro de la industria petrolera, por tocar el caso más emblemático, surgió luego de las evidentes diferencias entre el presidente de la República y el zar petrolero, Rafael Ramírez.
En otros sectores también se han desquitado de cualquier comentario que vacile, ante la extrema lealtad que se le debe a la revolución, con pases de factura a gerentes de niveles medios en empresas públicas.
– Fortalecimiento y ampliación de los logros del Poder Popular. El sistema de seguridad y protección social, implementado a través del Carnet de la Patria, se blindará, enfocándose en el ámbito de educación, salud, estabilidad laboral y vivienda.
Todo indica que los logros del Poder Popular, se resumen a ser portador del Carnet de la Patria, más importante que la cédula de identidad en este país, para acceder medianamente a cualquier beneficio que requiera un venezolano para subsistir.
No importa lo que usted haya trabajado, ni si fue un fiel seguidor del proceso “revolucionario”, ni tampoco si tiene años de lucha dentro de su comunidad para lograr las tan prometidas reivindicaciones sociales. Si usted no tiene un código QR, perdió su tiempo.
– Defensa de Venezuela desde todos los espacios frente a los ataques del imperialismo y el bloqueo de Estados Unidos (EEUU). Exhorta a la participación de todos los patriotas, quienes deberán proteger las instituciones, la integridad territorial y el derecho a la paz.
De acuerdo a este anunciado todos somos llamados a defender la patria, y desde la Asamblea Nacional Constituyente, se disponen a perseguir a los traidores, para que sean castigados con todo el peso de la ley. La propuesta de Diosdado Cabello y del resto de constituyentes, es crear leyes que “hagan morder el polvo” a todos aquellos que alienten la injerencia e intervención militar en Venezuela.
Faltaría preguntarle al “poder plenipotenciario” de la ANC, que leyes serían aplicables, a quienes desde el poder someten al hambre, la miseria y al aislamiento, a millones de venezolanos.
– El socialismo. Ratificación de la corriente ideológica bolivariana, chavista, humanista y multidimensional como único camino para la construcción de la Revolución Bolivariana.
No valdría la pena detenerse aquí, pues el socialismo aún está “En Construcción”.
Hace un par de días se agregó otra línea a la lista:
–Control y seguimiento en las áreas de Infraestructura y Servicios Públicos
“Para que las ministras y ministros se aboquen de manera inmediata a la solución junto al pueblo de problemas acuciosos para la cotidianidad de todas nuestras hermanas y todos nuestros hermanos”, dijo el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez en cadena nacional.
De acuerdo al Observatorio de Conflictividad Social de Venezuela 8 de cada 10 protestas son causadas por el colapso de los servicios públicos, entre ellos: Falta de electricidad, agua potable, gas doméstico o por los problemas del transporte.
Luego del fracaso de las Mesas Técnicas de Agua, Comités de Usuario del transporte, PVSA Gas Comunal, y las perreras, por nombrar solo algunos, nos mantenemos a la espera de las mágicas soluciones para el sin fin de problemas de servicios, que inclusive, han acabado con la vida de cientos de venezolanos.
https://puntodecorte.com/produccion-petrolera-venezolana/
